Amazón, un caso de éxito
Amazón, un caso de éxito

Jeff Bezos, tuvo una visión. Internet  crecería de forma exponencial. Confió en el potencial de aquella red, en el impacto que la utilización de internet provocaría en el mundo de los negocios, y no se equivocó.

En 1994, Bezos decidió apostar por una idea revolucionaria. Vendería libros a través internet. Eligió este producto por la sencilla razón de que el número de referencias existentes era de las más numerosas, tres millones de títulos que poder ofrecer a los usuarios. La librería más grande del mundo contaba con unos 175000 títulos, además, contaba con la posibilidad de que el usuario pudiese adquirir el producto desde cualquier lugar que tuviese conexión a internet.

En 1995 puso en marcha su tienda online Cadabra.com en un garaje, contando con la ayuda de tres procesadores que le ayudaran a almacenar la información. Una vez despegado el proyecto, renombró la empresa como Amazon. Hay quien señala que este cambio se debe al río Amazonas, el río más caudaloso del planeta, similitud con el caudal de artículos que Amazon ofrece, aunque en esa época, los listados de páginas web se ofrecía alfabéticamente, por lo que Amazon aparecía entre las primeras posiciones (concepto de posicionamiento web).

En poco tiempo, este negocio se convirtió en un verdadero éxito. Los usuarios podía adquirir libros desde un correo electrónico sin desplazamiento. Era una situación impensable hasta ese momento.

En 1997 Amazon comenzaba a cotizar en bolsa, ya era  la librería con más ventas del planeta. Posteriormente expandió  otros  productos, música, electrónica, hasta llegar a ser lo que es hoy día: el gigante de la venta en internet.

Desde el principio, el negocio fue estructurado pensando en las nuevas tecnologías, stock, pedidos, pagos… Esto hizo posible que el importe del pedido fuese ingresado en cuenta antes de enviar el producto, el producto era comprado antes de realizar el pago al proveedor, cosa que no ocurre en el negocio tradicional, donde la tienda abonaba el producto antes de que se produjera la venta.

Amazon es un ejemplo de superación, de creer y luchar por aquello que queremos.

Como contrapartida a esta historia inspiradora, os informamos que Jeff Bezos, ha sido elegido este año por la Confederación Internacional de Sindicatos (celebrada en Berlín) como el peor jefe del mundo, elegido por votación entre unas 20 mil personas, debido a prácticas de evasión de impuestos o condiciones de trabajo de sus empleados, entre otras prácticas.

Nosotros podemos orientarte para encontrar el camino del éxito, el de la ética… podemos aconsejarte ser buen tipo, pero… ¡cada cual escoge su camino!